Idea sueltas, me siento mejor ahora

Gracias Ed, en verdad agradezco todo lo que haz hecho por mi hasta la fecha, incluso lo que aun no haces, gracias por las palabras, el cariño, por permitirme ver en ti lo que había perdido, por la fe. La espiritualidad. Saberte sincero. Ahora puedo decir que hube sido desdichada sin ti.

Cierro los ojos y te siento, lo hago con miedo a que el sueño me domine y cambie la satisfacción de sentirte por algo trágico, veo también tu mirada de felicidad cuando las palabras se te olvidan, percibo tu aroma incomparable, que según tu es pachuli, que según yo es perfección, siento tus manos musicales. Cierro los ojos y hablo contigo, con el recuerdo de tu voz. No sé cuantas veces ha ocurrido lo mismo, no sé, creo que perdí la cuenta hace largo tiempo.
Pienso en tus palabras cuando dices que yo te hice, siendo consciente que tu has estado aquí desde antes que yo, que desde mi nacimiento no ha existido ni un solo segundo sin tu presencia, quizá fue al contrarío, quizá tu me hiciste a mi, quizá me fuiste creando a tu manera hasta el día en que por fin pudiste ver tu creación y yo al creador, quizás.
 Es tarde y me siento cansada, enferma, imaginando que si estuviera físicamente cerca de ti en este instante mis quejas serían mínimas a comparación  de mi factible satisfacción.